Desde la década de los setenta, el planeta ha sobrevivido bajo lo que expertos llaman un sobregiro ecológico. Esto quiere decir que los recursos naturales que la humanidad demanda para un año, están por arriba de lo que la misma tierra tiene la capacidad natural de regenerar en el mismo tiempo. 

¿Cómo ocurre este sobregiro?

Este sobregiro ecológico sucede porque los recursos naturales pueden ser cosechados más rápido de lo que vuelven a crecer.

A la medición que nos ayuda a saber esto se le llama biocapacidad y es la “capacidad de un área específica biológicamente productiva de generar un abastecimiento regular de recursos renovables y de absorber los desechos resultantes de su consumo”.

Cuando un área se explota más allá de su biocapacidad se vuelve un uso no sostenible de dicha área. 

Ejemplo de sobregiro

El problema con el uso no sostenible de áreas biológicas es que van perdiendo su capacidad de regenerarse y, al mismo tiempo, de absorber los desechos producidos por los humanos. 

Consideremos un bosque cuyos árboles talamos para utilizar la madera. Cuando la tala no se hace de manera sostenible, las tierras no tienen el tiempo suficiente de generar nuevos nutrientes que los árboles necesitan para crecer. En este caso el bosque llegó al límite de su biocapacidad. 

Las complicaciones son mucho mayores que el desabastecimiento de recursos. Los árboles absorben dióxido de carbono de nuestra atmósfera, limpiando el aire que respiramos. Además, son fuente de medicinas y son hogares que protegen a los animales, por nombrar algunas de las repercusiones explotar áreas sin medida. 

Este ejemplo del bosque se traduce a todas las áreas que actualmente se explotan sin planeación sostenible, sobretodo mares, selvas y ríos que son ricos en recursos naturales. 

Lo que significa la fecha del sobregiro ecológico

La fecha del sobregiro ecológico se va moviendo año con año y depende de mediciones hechas por Global Footprint Network que estudia la huella ecológica de la humanidad, cómo afecta a los recursos naturales y qué efectos tiene en el cambio climático. 

A inicio del año se empieza a contabilizar la huella ecológica de todo el mundo y se fija la fecha en la que dicha huella se vuelve más grande que la capacidad de la tierra de sostenerla. 

En 2018, la fecha del sobregiro fue el primero de agosto, lo que significa que para el mes número 8 la humanidad ya había consumido lo que la tierra puede producir ese año de manera sostenible.

Esos últimos 4 meses la humanidad no dejó de consumir recursos naturales; hoy en día es común que cuando un área ya no puede seguir produciendo, se busca otra área para explotar, y después otra y otra. El problema es que con el crecimiento de la demanda de recursos, eventualmente todas las áreas llegarán al límite de su biocapacidad y los ecosistemas colapsarán. 

El sobregiro ecológico es problema de todos y responsabilidad de todos. No es asunto solamente de los gobiernos, de las grandes empresas y de las industrias. La buena noticia es que, por esta misma razón, tenemos mucho poder de hacer el cambio y mover la fecha hasta que el planeta esté en balance. 

En definitiva, si todos viviéramos siguiendo esta lógica de producción y consumo, ¿cuántos planetas necesitaríamos? Haz el ejercicio con esta calculadora de huella ecológica.

#movethedate